Este sábado pasado volvimos a la Sierra del Manar, pero con más compaña. Aparte de mi Arriero, Moro y Puppy, nos acompañó Theo saliendo desde el establo, y a medio camino Javi, Loli, y dos pequeños humanos, Jesús y Diego.
Nos divertimos con la nieve, con los palos y el barro. Y disfrutamos de una frugal comida campera en el Cortjo del Manar.
Javi, aficionado al video y la fotografía, llevaba su cámara.